IMAGINAR, MEDIR, ORDENAR


«La forma en que nos relacionamos con el espacio y su representación gráfica han ido cambiando a lo largo del tiempo como consecuencia de las transformaciones en la imaginación geográfica, en las formas de medir y en las expectativas sociales que motivaron el ordenamiento de ese espacio.
Desde fines del siglo XVIII, la creación de Estados nacionales en todo el mundo occidental demandó una cartografía que alimentara el sentido de pertenencia y la conformación de un imaginario territorial compartido por los ciudadanos de esos Estados.
La apropiación del espacio bajo lógicas capitalistas creó conflictos entre las diversas formas de ocupación del territorio. Ello exigió producir planos de mensura como documentos de prueba sobre la posesión de los terrenos, que terminaron por imponer la propiedad privada como la forma dominante de ocupación, aunque no fue la única, ya que convivió con propiedades comunales, terrenos fiscales o carentes de propietario.
Esas demandas sociales impulsaron el desarrollo de nuevas técnicas y tecnologías para la medición del espacio y fomentaron la especialización de saberes y prácticas de mensura que los mapas y planos expuestos reflejan. Aunque también nos hablan de otras formas posibles de ocupación del territorio, de las proyecciones deseadas y no concretadas, y del poder de lo visual en las formas que nos relacionamos con el espacio.
plasmar en mapas y planos esas expectativas sociales, a partir de la muestra de colecciones públicas, como las del Archivo Gráfico de la Dirección de Topografía del Ministerio de Transportes y Obras Públicas o del Museo Histórico Nacional; como también de objetos de colecciones particulares.»
Extracto: Museo Histórico Nacional